viernes, 19 de marzo de 2021

El Sistema Agrícola Chinampero de la Ciudad de México aún existe y sigue activo, son cerca de 20,922 chinampas, 2,215 hectáreas de superficie

La subsistencia actual de las chinampas y su uso

Fuente: Pixybay, KinEnriquez

Muchos hemos visitado o escuchado de Xochimilco, lo conocemos por sus bonitas y coloridas trajineras con sus paseos por los canales, mientras disfrutamos en compañía de nuestros amigos o familia, compartiendo una deliciosa comida mientras disfrutamos del mariachi o la marimba. Conforme avanzamos en el recorrido notamos de diversos establecimientos a los costados de los canales , cuando en años anteriores estos se encontraban sobre una chinampa o lo que alguna vez lo fue.

Pocos conocemos el verdadero propósito de una chinampa y su importancia en contexto con la naturaleza, caracterizadas por estar llenas de vida en donde se albergan especies de flora y fauna, sobre las que se siembra y cosecha.

En donde antes se observaban árboles frondosos , verdes , llenos de frutos , ahora pareciera que crecen postes grises sin vida, llenos de basura publicitaria, invadiendo el espacio de donde deberían correr ríos de agua y al contrario, ahora son de carros, y eso es si puede decir que corren... pues con el paso de los años la sobre población ha venido afectando los medios de transporte ocasionando un tráfico espantoso.

La naturaleza se esfuerza por recuperar su lugar, sin embargo podemos observar que derivado de la basura , la contaminación … lo que debiera ser un río con agua cristalina ahora es un cuerpo de agua espeso y contaminado transportando la basura , misma que provoca las inundaciones


Pese a ser desplazada por todo esto que llamamos “modernidad”; el pavimento, las calles y las edificaciones. Aunque no lo parezca, las chinampas aún existen, cual oasis en medio de la ciudad, ya no se puede apreciar su esplendoroso paisaje del cual hablan muchos autores, e inspiraron a varios artistas. Su remanencia aún conserva su belleza y encanto, que maravilla a cualquiera que las visita.

La existencia de las chinampas en la actualidad es por no decir menos,un milagro. Las diferentes administraciones de una ciudad que creció de manera vertiginosa durante las últimas décadas, necesitó de agua y espacios para vivienda, industria y servicios. Permitiendo una expansión anárquica que terminaría con muchas de las áreas rurales, bosques y terrenos agrícolas, hoy necesarios para controlar el clima, la temperatura y la fuerte contaminación del aire que respiramos los aproximadamente veinte millones de habitantes.


Su sobrevivencia, se debe al gran esfuerzo de los defensores del territorio, que han vivido aquí por generaciones y tienen una estrecha relación con su entorno, la naturaleza y que se rehúsan a desaparecer. Hablamos de sus guardianes, “Los Chinamperos”.

Ya en 1950 los canales se habían secado casi por completo, pero la población que aún encontraba en las actividades agropecuarias su principal sustento, protestó enérgicamente negándose a desaparecer, preservando este lugar, su entorno, flora y fauna, pero también sus costumbres, tradiciones y conocimientos.

Actualmente se estima que la superficie total del Sistema Agrícola Chinampero de la Ciudad de México; es cerca de 20,922 chinampas, que corresponden a 2,215 hectáreas de superficie, de las cuales solamente 3,586 chinampas están activas con algún tipo de producción agrícola y el resto de ellas (17,336 ) , están abandonadas.

Es decir, solamente el 19% permanece activo y cultivándose, según un estudio realizado entre julio y diciembre de 2018 por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

Al principio nos referimos a las chinampas y Xochimilco, las 2 ,215 hectáreas son exclusivas de este lugar. Esta superficie se compone por 5 zonas chinamperas , ubicadas en: Xochimilco, San Gregorio Atlapulco, San Luis Tlaxialtemalco, San Pedro Tláhuac y San Andrés Mixquic.

En las cuales se llevan a cabo actividades de cultivo, aplicadas de dos maneras; cielo abierto y agricultura protegida (invernaderos, malla sombra o macro túneles)

Fuente: Tesis “Las Chinampas Del Humedal De Xochimilco: Sistemas De Biorremediación Para La Sostenibilidad"

La zona lacustre de Xochimilco en conjunto con su singular medio de transporte y las chinampas, conforma un paisaje importante histórico y ejemplo ecológico. Tanto que en el año 1987 la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), reconoció su valor e importancia, que las clasificó como patrimonio natural y cultural de la humanidad.
Por su parte la la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), reconoció en el año 2017 a las Chinampas como un Sistema Importante del Patrimonio Agrícola Mundial (SIPAM).

Deacuerdo a datos la FAO en México, el sistema chinampero produce una variedad de cultivos , son más de 60 entre; hortalizas, verduras frutas y plantas y flores. El valor anual de la producción agrícola en el Sistema Agrícola Chinampero de la Ciudad de México se estimó en 245 millones de pesos, que corresponden a 19,213 toneladas de alimentos.

El 80% de la producción se concentra en cuatro cultivos: Lechuga, romerito, verdolaga y berza. Del maíz se obtienen medio millón de elotes y 130 toneladas de grano.

En cuanto a plantas ornamentales se produce anualmente entre 23 y 24 millones. Destacan las plantas aromáticas, la nochebuena , el cempasúchil, el geranio y la petunia. 

Estas también son utilizadas para el pastoreo de vacas, como invernaderos y áreas de recreación. 

Tipos de siembra en la chinampas

Fuente: SAGARPA, Datos del cierre agrícola, 2018 

Conservar y salvaguardar el patrimonio productivo chinampero depende de la creación y fortalecimiento de los vínculos que las zonas rurales puedan generar con las zonas urbanas.

Los habitantes de Xochimilco saben que para mantener sus raíces culturales es primordial conservar al 100 por ciento el ecosistema, para ello en coordinación con instituciones tanto públicas como privadas, realizan esfuerzos para preservar este lugar, con acciones como saneamiento en contra del insecto defoliador y del muérdago, rescate y restauración del área chinampera, en donde se siembra árboles de ahuejotes y se crean soportes para evitar que se desborde la tierra.

Otra de las actividades importantes que se llevan a cabo es la limpieza de los canales del zacate, el lirio acuático y de la basura que se arroja a los canales. Los dos primeros se generan en gran cantidad que después hace que los canales no sean navegables y el tercero es un problema que no debería existir y que afecta al ecosistema de Xochimilco.

viernes, 12 de marzo de 2021

Las chinampas, una muerte que lleva más de 500 años

La desaparición de los jardines flotantes

Hemos escuchado y hablado mucho sobre las míticas Chinampas, esas que formaron parte del sistema agrícola prehispánico y que también fueron base para el desarrollo de los pueblos y se encontraban por doquier; en Xochimilco, Iztapalapa e Iztacalco, fueron famosas las de Culhuacán, Mexicalzingo, Santa Anita y la de Magdalena Mixhuca. Que con sus árboles preciosos (ahuejotes) formaron paisajes maravillosos que pintaron color jade el Valle de México como lo indica Nezahualcóyotl en uno de sus poemas.

Fuente: Museo Nocional de antropología 

Tal era la vista que, cuando los españoles salieron de Cholula y cruzaron los volcanes quedaron maravillados del paisaje que se presentaba ante ellos. Una cuenca lacustre de tipo endorreico rodeada por grandes serranías y volcanes, dice Hugo García Capistran.

El Fraile Toribio Benavente Motolinía describe este espacio de la siguiente manera: “Es tanta la abundancia y tan grande la riqueza y fertilidad de esta tierra llamada Nueva España, que no se puede creer, más lo y mejor de ella y lo que más ventaja hace a todas las tierras y provincias, son aquellos montes y corona de sierras, que están a la redonda de la ciudad de México, en los cuales se hallan en abundancia todo lo que está dicho y mucho más; y además de las muchas maneras de árboles y plantas y yerbas virtuosas que en ellos se hallan”. (Benavente Motolinía, 1984: 35).

Este ambiente lleno de agua y sierras con verdes bosques generaba un clima templado y un entorno rico en diversos recursos. Los bosques eran maderables y se podía practicar la cacería; en los lagos se pescaban diversas especies de peces, también se podían cazar gran variedad de aves acuáticas tanto endémicas como migratorias.

¿Y que paso con su esplendor, con toda esta abundancia que muchos autores describen sobre estos jardines flotantes, sobre su agua de extraordinaria fertilidad, con la que las personas sembraron las plantas comestibles y las flores sagradas que requerían las innumerables bocas y las innumerables ceremonias?

Lo cierto es que un existe, incluso hasta hace algunos años quedaban algunos canales, no solo de nombre para alguna avenida, se podía recorrer por ellos como el canala de la viga. Pero en la actualidad solo nos queda lo que podría considerarse como un remanente de ese pasado lacustre, es decir una minúscula parte de lo que alguna vez fue y que cada vez más se encuentra en un punto crítico, con alta probabilidad de dejar de existir. Pues para el hombre "civilizado", quien ha perdió su conexión con la naturaleza y su encanto del mundo, este lugar no es más que un espacio de tierra y un cuerpo de agua, que puede ser utilizado y explotado a diestra y siniestra.

Fuente: Museo de arte moderno;  pintura de Jesús Cabrera Pulquería "El vacilón", 1919 Óleo sobre tela

La desaparición del lago junto con las chinampas no es algo que se dio recientemente, ni de manera inmediata, por el contrario, podría llamársele una muerte lenta, que lleva más de 500 años.

La Conquista supuso un trastorno ecológico radical. La ciudad que se construyó sobre las ruinas de Tenochtitlán renegó del pasado lacustre: el agua, para los españoles, era un estorbo, así que taparon canales, quitaron las chinampas y elevaron sobre el suelo húmedo las calles requeridas por su nueva civilización ecuestre

A eso se sumó lo que fue la gigantesca empresa de desagüe de los lagos, fruto de la cosmogonía española de lo seco, emprendida en el siglo XVII, con la tala de bosques, la sustitución de canales por calles obstruía el drenaje de la ciudad y provocaron en 1553, 1580 y 1604 inundaciones tan grandes que el virreinato se veía obligado a emprender obras hidráulicas.

Por si fuera poco, el crecimiento urbano no ayudo en nada, no solo invadió los espacios naturales, sino que los deforesto, sustrajo su fuente de vida, el agua, para cubrir la necedades de una creciente población, sobre todo a mediados del siglo xx cuando la mancha urbano creció desmedidamente.

Así fue como poco a poco, las chinampas desaparecieron paulatinamente casi en su totalidad, ahogadas por las crecidas aguas, podridas por la silva acuática de nuevo reinante y por la desecación. Sin embargo, el saber de la “chinampería” quedó intacto en la mente de los pocos sobrevivientes de las pestes, las migraciones y los trabajos forzados. Que reanudaron la construcción de las chinampas y el cultivo de las hortalizas y las flores, han sido guardianes y conservado este especio, como legado y como su propia broma de vida.

Tierra, yo gozo en ser labriego
y no abandono el verde campo por la ciudad;
me diste cuna, hogar, sosiego:
te debo la tranquilidad.

Fragmento de Himno a la tierra, Ramon Emilio Jimenez 

Xochimilco y Tláhuac son los vestigios de este pasado, en el cual aún se lleva a cabo la actividad chinampera, sembrando y cosechando, alimentos, plantas y flores que en muchos casos los productos vienen de estos lugares y no lo sabemos, como la noche buena o el cempasúchil y varios alimentos. No solo son conservan la chinampería y el método tradicional como herencia milenaria, también son guardines de los espacios naturales de la flora y de fauna de estos lugares.

domingo, 7 de marzo de 2021

Chinampas

En la Cerca de la Cañas

A lo largo de toda la costa meridional de los lagos de Xochimilco, la naturaleza puso en las manos del hombre tres tesoros: aguas de poca profundidad, manantiales de agua dulce y vegetación acuática en abundancia.

Jalar, juntar y amontonar los espesos mantos de vegetación acuática hasta formar una cama vegetal sobre la cual extender tierra fangosa del fondo del lago.

Así los antiguos pobladores hicieron una obra arquitectónica única, llamada Chinampa.

Con ellas se estableció una cultura del agua. Los pobladores del valle México además de establecer lugares donde vivir en un espacio natural, lograron la transformación del entorno en un espacio de producción fértil junto con su sistema de transporte en equilibrio con el medio ambiente.

El paisaje de las chinampas era un paréntesis de tierra y agua que se situaba en los confines del mundo y tierra silvestre de la laguna.

¿Qué podía significar la laguna para los primeros hombres que colonizaron sus riberas? Mar de fertilidad, fuente de vida. Pero también espacio inquietante inmensidad y profundidad, lo desconocido, espacio doblado de peligros y temores, cargado de sacralidad, fuente de oscuras leyendas.

Dentro de estas encontramos la leyenda del monstruo acuático, que de monstruo solo tiene el nombre, así es hablamos del Axolotl. También encontramos historias como la del Ahuízotl, el perro de agua con una mano de cola que hundía a los navegantes y así como estas leyendas, hay muchas mas...

Regresando a las chinampas, este método no era exclusivo de los xochimilcas en los bordes sureños de los lagos. Por las riberas del inmenso lago de Texcoco y más tarde alrededor del islote de la fundación mítica de Tenochtitlan, era práctica habitual la construcción de tierra sobre el agua para ampliar la aldea, hacer la ciudad. 

Algunos autores indican que antecede a estas culturas y que es una técnica iniciada en la época de los toltecas.

Artes de México en su articulo pequeña historia de las chinampas mencionan que cada chinampa era una propiedad que encerraba una casa, un jardín, y sobre todo árboles, aquellos sauces blancos, los ahuejotes, que son los setos vivos del chinamitl y que junto con la red acuática dibujaban el paisaje de la ciudad lacustre.

En este punto vale preguntarnos ¿Qué son las chinampas? Las chinampas o chinamitl, del nahuatl, <cerco de cañas>. Son islotes artificiales, construidos sobre el lago, utilizadas como un sistema productivo agrícola. El cual consiste en colocar el lodo del fondo lacustre, rico en materia orgánica y nutrimentos, protegiéndolo mediante una empalizada o cerco, seguido de la siembra y acompañamiento de los sauces hermosos conocidos como ahuexotl <ahuejotes>. En donde el acceso al agua es de forma natural, ya que absorbe el agua del mismo lago. Así los cultivos disfrutan de la humedad permanentemente por lo que tampoco están condicionado a temporadas de lluvia.

Para finalizar cerramos con este texto de Spengler, que refleja la visón de los pueblos precolombinos, entre ellos los Xochimilcas, las chinampas y la agricultura.

"Un cambio profundo comienza al iniciarse la agricultura, actividad artificial, completamente ajena a los cazadores y los pastores. El que cava y cultiva la tierra no pretende saquear la naturaleza, sino cambiarla [...] Pero al hacer esto, el hombre mismo se torna planta, es decir, aldeano, arraigado en el suelo cultivado. El alma del hombre descubre un alma en el paisaje que le rodea. Se anuncia entonces un nuevo ligamen de la existencia [...] La tierra es ahora ya la madre tierra. Se anuda una relación profunda entre la siembra y la concepción, entre la cosecha y la muerte, entre el niño y el grano [...] Y como expresión perfecta de este sentimiento vital surge por doquier la figura simbólica de la casa labradora, que en la disposición de sus estancias y en los rasgos de su forma exterior nos habla de la sangre que corre por las venas de sus habitantes. La casa aldeana es el gran símbolo del sedentarismo. Es una planta. Es propiedad en el sentido más sagrado. Los buenos espíritus del hogar y de la puerta, del solar y de las estancias, Vesta, Jano, los lares y los penates, tienen su domicilio fijo, como el hombre mismo."