viernes, 14 de mayo de 2021

¿Quién no ha recorrido por los canales de Xochimilco, rodeado de maravillosos paisajes sobre una colorida trajinera? Pero...¿sabes cuál es su origen?

“Splash” suena sobre el agua, provocado por el chapoteo del palo contra el agua, y el silencio ensordecedor se ve interrumpido por un canto melodioso. El rojizo saludo matinal se asoma por el oriente, marcando la silueta oscura de los guardianes y eternos amantes. Allí entre las chinampas y ahuejotes verdes esmeralda como columnas de jade sobre el lago, navegando se encuentra el chinampero con su canoa de construcción original y simbólica, que boga serenidad sobre las aguas, deslizándose suavemente al impulso de remo sobre las aguas mientras suenas un splash.

Fuente: Pinteres; Xochimilco: Autor : Armando Ahuatzi Tecnica : oleo/tela Medidas : 120x150 cms.

La figura del chinampero es legendaria plasmada en aquellos horizontes de ahuejotes verticales y de alcatraces floridos, dice Rodolfo Cordero en su libro "Mitos y Leyedas de Xochimilco; Las Acallis, Canoas". Y es que no se puede hablar de las canoas, chalupas y/o trajineras, sin hablar de los chinamperos.

Las canoas son el medio de transporte que por varios siglos han surcado los caminos lacustres y misteriosos de Xochimilco en toda la región del lago y la zona chinampera. Estas embarcaciones recibían el nombre de acalli <agua de canoas> sin ser una interpretación muy exacta, con ellas, además moverse por el lago, también eran ocupadas para transportar los alimentos que se producía en las chinampas.

Alejandro Peralta en su articulo Manual para comprender y construir una trajinera, menciona; "Estas embarcaciones fueron tan importantes que se calcula que a la llegada de los conquistadores en el año 1519 la cuenca de México era surcada diariamente por unas 80,000 canoas o acalli aproximadamente. Se trataba de embarcaciones de todo tipo y tamaño cuyo tránsito impactó a los europeos".

“… había en México muchas acallis o barcas para servicio de las casas, y otras muchas de tratantes que venían con bastimentos a la ciudad, y todos los pueblos de la redonda, que están llenos de barcas que nunca cesan de entrar y salir de la ciudad, la cuales eran innmerables. En las calzadas habían puentes que fácilmente se podían alzar; y para guardarse de la parte del agua eran las barcas que digo, que eran sin cuenta, porque hervían por el agua y por las calles.”

Los acalli se tratan de canoas movidas por un remo o pértiga, formadas por una estructura de madera de fondo plano, alargadas y esbeltas, carecían de juntas o clavos, podían ser talladas a partir de un solo tronco de árbol; “bajaban de la Cordillera del Ajusco los monteros con sus canoas talladas en Los troncos de los Oyamel y Ocote para venderlos a los chinamperos, posteriormente los carpinteros nativos excelentes para este tipo de labor las hicieron con tablones las canoas”, indica Rodolfo Cordero.

Por su forma las canoas son símbolos lunares, representan la serpiente de dos cabezas el emblema de la Coyolxauhqui, serpiente de la que Sahagún dice:

Hay una culebra en esta tierra que tiene dos cabezas, una en un lugar de la cabeza y otra en lugar de la cola y llamamos Maquizcoatl; tiene dos cabezas y en cada una de ellas tiene ojos boca dientes y lengua, no tiene cola ninguna. No es grande ni es larga sino pequeña; tiene cuatro rayas negras por el lomo y otras cuatro coloradas en un lado y otras cuatro amarillas en el otro y está culebra se llama culebra espantosa, raramente aparece”.

Con el tiempo las embarcaciones fueron cambiando, pero conservaron sus elementos como las dos cabezas y los colores; ya no eran talladas sino ensambladas con varias piezas de madera, con troncos gruesos y tablones. Rodolfo Cordero vuelve a decir; "Las canoas tienen la forma de una pirámide truncada de base rectangular, alargada coma invertida y hueca. Se construyen con dos brazos de tablones largos con forma de trapecio, las orillas de las dos cabezas se refuerzan con, maderas duras y en cada una de sus esquinas tienen escuadras de hierro, de refuerzo una argolla de herrería pende con una cadena que sirve para sujetar la a las estacas de embarcaderos".

No solo cambiaron en la forma que eran elaboradas, sino que también recibieron otros nombres como “Canoa” ya propiamente, “Chalupa” y posteriormente “Trajineras”. La primera palabra, Canoa, no es castellana, proviene del Caribe y era el nombre que recibían las embarcaciones pequeñas que utilizaban los nativos.

Por su parte el término de Trajinera era aplicado al comercio (Trajinar significa “transportar géneros de un lado a otro”) aunque su origen no contemplaba el uso turístico que con el tiempo se les daría a estas naves, no significa que sea errado.

Finalmente, la palabra Chalupa pasó del holandés Sloep al francés Chaloupe y probablemente fue introducida en México durante el siglo XIX, años en los que hubo una notable influencia francesa y se propusieron una gran cantidad de proyectos para implementar de manera comercial la navegación en lagos y canales de la cuenca, como resultado el paseo de la viga y Xochimilco brillaron por su esplendor y maravillosos paisajes

Fue en la misma época cuando el potencial turístico de Xochimilco fue descubierto entre 1910 y 1920, durante el porfiriato (por ello la influencia francesa), cuando comenzó la construcción de sus embarcaderos. La palabra “embarcadero” alude a un sitio, lugar o paraje acondicionado o destinado para embarcar mercancías o personas

Así los paseos a Xochimilco se hicieron comunes entre los catrines (concepto establecido durante esta época para hacer referencia a los hombres que siempre iban vestidos de manera muy elegante). El desarrollo social ocasionó que las necesidades de las personas se fueron diversificando, añadiendo el ocio y la diversión a la lista. Los paseos en trajineras de forma “turística”, con motivo de mero entretenimiento, comenzaron a hacerse populares.

La mayor demanda en el servicio y la necesidad de agradar a las habitantes de la ciudad que comenzaron a visitar los canales de Xochimilco, empezaron a implementarán mejoras en las embarcaciones. Como las personas se quejaban del sol se adaptó un techo de manta que posteriormente cambiaría por uno laminado y unas sillas medianas de madera tejidas de tule para disfrutar del bello paisaje. Otra característica de las canoas es que se les marca el nombre del propietario y una frase de identificación en los brazos por ejemplo “Hilarión Basilio o despacio, pero llegamos” cosa que pasó ponerse al frente junto con las medias luna.

Las medialunas son portadas o arcos que Xochimilco y la región chinampera de ese entonces (Iztacalco, Iztapalapa, Mixquic, etc.) presentaban en las fiestas, adornando los pórticos de las iglesias, la entrada de las calles y callejones. Pero Xochimilco decora también los arcos para los toldos de sus Canoas.

Estos adornos en forma de arcos y collares hechos con flores naturales, ramas de ahuejote y amarradas con tule o chacaltule se colocaban en la parte de enfrente de la trajinera, cosa que sigue hasta la actualidad. Rodolfo cordero nuevamente nos ilustra ahora en su escrito "Las Medias Lunas de las Canoas"; “En algunos días festivos los viernes y sábados en las vísperas de las fiestas los chinamperos lavaban las canoístas las pintaban con polvo llamado congo que les daba un color amarillento y por la tarde después de su labor enfloran la media luna. Preparando los manojos de flores de la mercadela con pétalos color amarillento, con las corolas hacia las líneas y grecas del arco”.

Las medias lunas combinaban el colorido de las flores en su superficie, entre las que usaban están los confitillos azules para las letras, clavellina roja, claveles de varios colores, margaritas blancas, dalias magenta y otras.
Las ahora trajineras aun con los cambios, siguieron conservando los elementos “originales” de las acalli, esos que le dieron su esencia. Tanto los colores; el amarillo y el rojo que son de la maquizcoatl, así como su forma de dos cabezas.

Resulta que las medias lunas también se vinculan con esta idea de la serpiente. La luna creciente en uno de sus primeros menguantes u octante es un arco, como las portadas de las canoas, la serpiente representa a la luna con un cuerpo arqueado hacia arriba y ambos lados caen en sus extremos mostrando las dos cabezas del mítico animal.

Las medias lunas descubren su simbolismo en el paseo lacustre. En los dibujos del códice vindobonensis se representa la luna con un arco con medio círculo formado por una serpiente de dos cabezas con el cuerpo hacia abajo sobre el plano rectangular tocando con flores, el dibujo invertido hacia arriba es idéntico a las medias lunas de las trajineras que bogan con barullo de fiestas entre cantos de mariachis y marimbas, vendedoras de flores, comida y los ya no tan comunes fotógrafos.

Por supuesto, el diseño original ha tenido a través del tiempo sus variantes, principalmente por cuestiones económicas. El arco cambió por una portada hecha de un colchón de zacate, el cual se coloca en un bastidor de madera, y las flores se sustituyeron por adornos o pintadas. Quedando así sintetizada la idea del arco sobre el que se construyeron guías o motivos que lo adornan y le dan una belleza rústica propia.

Hoy en día viajar en una trajinera es muy común y normal, hablando en el sentido del ocio pues resulta una actividad muy atractiva y entretenida. Esto no solo se debe a la preciosa balsa en la que se paseas, sino por todo lo que conlleva pues ¿A quién no le gusta un paseo en donde abundan la comida y la bebida mientras se está rodeado de música y la compañía de personas con ganas de celebrar?

Pero existe otra realidad, la de los habitantes, quienes no usan las trajineras como medio de transporte turístico, sino como su medio de transporte del día a día, para realizar sus actividades normales ya sea para moverse o trasladar mercancías y productos. Aunque ellos no lo hacen en las trajineras sino en una canoa normal, sin la estructura del techo ni sillas, sólo con su enorme remo o las comerciantes que se acercan en su chalupa a las trajineras a vender comida, flores y/o artesanías. Cada una es diferente y tiene sus propias características y usos.

La clasificación de las canoas Xochimilco, deacuerdo a Rdolfo Cordero, es la siguiente:
  • Canoa de porte o serena, mide aproximadamente 20 m de largo
  • Canoa de medio porte medida aproximadamente 10 m de largo
  • Canoa de 7 varas se conoce como trajinera y es la usa en el Paseo dominical la distinguen su media luna decorada
  • Canoita es más angosta que la anterior y es la más usada para el chinampero
  • Chalupon mide medio metro de ancho en su fondo es y para tres personas
  •  Chalupa a es para dos personas
  • Chalupita tiene dos cabezas terminadas en punta es para una persona la usan las mujeres para vender flores en el paseo dominical en ella navegaba metztlixochil, también lo sábado para embelecarse con las flores de ninfa de las lagunas de Xochimilco

Las advocaciones serpentesca de la diosa luna, sus enramadas sartale o arcos floridos, símbolo de aquella serpiente cuate que está en las canoas mientras navegan en los caminos lacustres, en dónde todavía pueden verse las culebras negras que huyen con la cabeza levantada mostrando el rojo negro de sus lenguas bíficas (la maquizcoatl lo hacía con sus dos cabezas en alto) dejando una estela plateada al alejarse al igual que las canoas del legendario chinampero.

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